sábado, 27 de febrero de 2010

el terremoto visto de otra forma

Hola mi querida. Ante todo, quiero daros las gracias por la serenidad con que están afrontando las últimas manifestaciones de la acomodación energética de Gaia. El terremoto de Chile, el de Japón y sus réplicas, de hecho, son señales de que la vieja y atascada energía, en definitiva se marcha de ese planeta. Y en su lugar, queda el empuje necesario para atraer lo nuevo. La nueva energía, necesariamente, pasa por el reparto de los recursos financieros a todos los que necesitan, como un principio de igualdad y de fraternidad. Y ese es precisamente el tema de mi mensaje de hoy.

A despecho de todos los esfuerzos de la oscuridad, en el sentido de boicotear la distribución de los recursos del Plano Gesara, Yo, Saint Germain, os puedo asegurar que eso ya es una realidad y recién empieza a concretarse. Aunque el Gobierno Divino no esté actuando oficialmente, se encuentra muy operativo y ya cuenta con la aprobación de innúmeros gobiernos. Eso nos hace pensar que muy pronto nuestros planes estarán siendo ejecutados, dando así inicio a la gran Era Dorada en la Tierra.

Ya tenemos todo planeado, acerca de la distribución de ese dinero. Pero antes, tenemos que promover la reforma del sistema financiero, re-dibujar el papel de los bancos, establecer las normas para las nuevas monedas y, sobretodo, asegurarnos de que no habrá fallos en su funcionamiento. No serán permitidas las tramas financieras, ni los sobornos, ni tampoco la codicia galopante que minaba a los representantes del poder. Todo eso será parte de un pasado muerto y enterrado.

Lo importante es que muy pronto, todo estará en su debido lugar. Ya no habrá espacio para el hambre en el mundo, o la explotación por parte del hombre a sus semejantes. La Humanidad estará libre de la oscuridad y de su control. La ambición desenfrenada del sistema capitalista cederá lugar a la fraternidad y la paz entre todos los seres. Y todo eso está al alcance de las manos.

Yo Soy el que Yo Soy, Adamus Saint Germain y os envuelvo en mi amor y compasión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario